Encalar el gallinero

cal viva - gallinas

La limpieza y el orden es el nombre del juego cuando se trata de criar pollos. Muchos parásitos, bacterias y otros parásitos que son perjudiciales para la calidad de vida (y también para la salud) de los pollos pueden sobrevivir sin ser detectados en las grietas y hendiduras del gallinero durante períodos muy largos. Mantenerlos en niveles tolerables debería ser el objetivo principal del criador de pollos para tener una manada sana. Una forma de hacer que el gallinero no sólo sea más higiénico, sino también visualmente atractivo, es encalarlo. Para ello se utiliza cal apagada o cal viva.

¿Qué es la cal?

La caliza es una roca llamada sedimentaria, es decir, una roca que se ha formado por deposición. Cada año se extraen más de cinco mil millones de toneladas de esta roca. El principal componente de esta roca, muy popular y ampliamente utilizada en la industria de la construcción, es la sustancia química carbonato de calcio (CaCO3), presente en forma de minerales. El carbonato de calcio es un compuesto de calcio, carbono y oxígeno y se conoce coloquialmente como cal ácida carbónica. Se utiliza en la fertilización del suelo, como cal para piensos, como aditivo alimentario y es necesario en muchos otros procesos industriales. Sin embargo, el óxido o hidróxido de calcio es necesario para su uso en los gallineros.

Cal viva o cal apagada

El óxido de calcio, también llamado cal no apagada, cal viva o cal cáustica, es un polvo blanco producido por la combustión de la cal. Cuando la piedra caliza se “quema” a temperaturas superiores a 800 grados Celsius, se desacidifica expulsando dióxido de carbono, lo que también se conoce como calcinación, y se forma óxido de calcio. Si ahora se añade agua al óxido de calcio, se genera un calor muy fuerte. El óxido de calcio reacciona con el agua hasta convertirse en hidróxido de calcio y pasa a llamarse cal apagada, también cal apagada, cal blanca hidratada, lechada de cal o agua de cal. El efecto corrosivo se ha utilizado durante generaciones para desinfectar los establos y destruir los agentes patógenos.

¿Qué cal utilizar para el gallinero?

El tipo de cal que elija para desinfectar su gallinero depende en gran medida de sus preferencias personales. O bien se recurre a una variante ya apagada o bien se asume el apagado de la cal añadiendo agua uno mismo. Este último es algo desagradable para las mentes ansiosas, pero se dice que mezclar la cal sin escamar uno mismo tiene un efecto desinfectante más fuerte. Sin embargo, si se observan las medidas de protección (agitación cuidadosa en el agua, uso de gafas protectoras), se pueden evitar posibles accidentes al mezclar la pintura a la cal. Ahora la pregunta sigue siendo, que la designación ahora que la forma de cal da derecho. La cal no apagada está disponible comercialmente como cal no apagada, cal viva, cal cáustica, tierra de cal o cal libre, la cal apagada está disponible comercialmente como cal apagada, masa de cal apagada, pintura de cal, leche de cal, cal hidratada, cal blanca hidratada o cal blanca de pared.

Cómo encalar correctamente un gallinero

Instrucciones y consejos para encalar correctamente su gallinero.

Preparación

Si se decide utilizar una variante de cal no escamada, la solución lista para usar debe prepararse primero según las instrucciones del fabricante. Tras la mezcla, la cal viva suele dejarse reposar durante al menos 10 horas. Durante este tiempo, la mezcla se hincha considerablemente y a veces hay que volver a darle la consistencia deseada con un poco de agua.

Mezcla de cal viva

¡Al mezclar, asegúrese de seguir las instrucciones del fabricante! Primero se vierte el agua en un cubo y luego se añade gradualmente la cal viva. La fórmula mágica es el cuidado y la lentitud. El proceso de “apagado de la cal” está asociado a un fuerte desarrollo del calor, durante el cual el agua añadida a veces se evapora literalmente. Tanto la cal apagada como la no apagada son muy irritantes, y el contacto con los ojos puede provocar ceguera. Por lo tanto, las gafas de protección son obligatorias tanto al preparar la mezcla como al procesarla.

Consistencia

La consistencia “adecuada” depende, por un lado, del método de aplicación deseado (brocha o afilado) y, por otro, de la superficie a tratar. Cuanto más rugosa es la superficie, mejor se adhiere la suspensión al sustrato, pero más gruesa o más frecuentemente debe aplicarse para rellenar suficientemente todas las grietas. Por regla general, varias capas finas superpuestas proporcionan la mejor durabilidad posible. En el caso de las capas más gruesas, suele bastar con una sola capa, pero la cal también tiende a desprenderse rápidamente. También los aditivos, que suelen recomendarse para hacer que la pintura de cal de la pared sea más duradera y resistente a las manchas, sólo son adecuados hasta cierto punto y a menudo provocan desconchones en las paredes.

Cuajada como protección contra la abrasión

A menudo se mezcla una taza de cuajada en la pintura de cal para la capa final con el fin de obtener un revestimiento resistente a la abrasión. Esto alarga las moléculas aplicadas (reacción de la cal-caseína), hace que la superficie sea más dura y aumenta en consecuencia la resistencia a la limpieza de la superficie. Sin embargo, la superficie más dura también puede causar tensiones, que a su vez pueden provocar grietas y descamación. Especialmente si la pintura se ha aplicado con demasiado espesor.

Regar las paredes de antemano

Regar el muro previamente ha demostrado intensificar la durabilidad. Para ello, basta con aplicar con una brocha agua limpia a la pared y, a continuación, aplicar varias capas (finas) de cal apagada, húmeda sobre húmeda. Con esta medida se aporta ácido carbónico a la pared y se favorece el efecto de la carbonatación. Si la cal se aplica en una capa fina sobre la pared seca, no puede absorber suficiente CO2 del aire para endurecerse de nuevo (carbonato) debido a la rápida eliminación del agua.  Por lo tanto, deben aplicarse siempre varias capas superpuestas en húmedo, para conseguir la deseada “re-silicificación” y la correspondiente durabilidad.

Frecuencia de encalado

La frecuencia con la que un gallinero necesita ser “re-limpiado” depende en gran parte del estado de las paredes y de la durabilidad de la capa de pintura anterior. Por regla general, basta con volver a encalar las paredes cada año. En algunos casos, sin embargo, es necesario encalar antes porque la capa de cal ya se ha descascarillado o se ha desprendido prematuramente.